Me levanté he hice lo de siempre; me tomé las cosas con calma, porque aunque quiera por la mañana no tengo otro modo de hacerlas.
Retumbó en mi cabeza un más que típico "la droga es mala", sisisi, lo se, pero me hace sentir bien, me hace volar, reir, me relaja. No lo se, no lo veo tan mal es algo natural, no estamos hablando de cocaína, ni extasis, yo paso de LSD de ese, ni MDMA, ¡qué va!.
Y comencé a hilar cada una de las partes de mi sueño de la noche anterior, había sido tan extraño, me había dejado descolocada, confusa y extrañada.
Pues, ¿ somos capaces de admirar a alguien hasta el punto de soñar con esa persona? Te hace reflexionar a cerca de lo que pasa en tu vida, de porqué escuchas doscientos millones de veces al día la misma canción sin cansarte de ella, y por qué para tí tiene un significado especial. Te hace pensar en por qué lloras como una imbécil cuando escuchas la canción que tu chico t ha dedicado.
Son tantas cosas superfluas que en el fondo creo que estoy divagando.
No sé, es una sensación extraña; espctacularmente inusual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario